"Fuertes en su Palabra"

Y no nos dejes caer en tentación (Mateo 6:13a NIV).

Esta es la Sexta Petición del Padrenuestro. Con ella aprendemos que «Dios, en verdad, no tienta a nadie; pero con esta petición le rogamos que nos guarde y preserve, a fin de que el diablo, el mundo, y nuestra carne, no nos engañen ni seduzcan, llevándonos a una fe errónea, a la desesperación, y a otras grandes vergüenzas y vicios. Y aun cuando fuéremos tentados a ello, que al fin logremos vencer y retener la victoria».

Es triste ver que muchos se alejan gradualmente de la fe cristiana, hasta que su fe se marchita y muere. Oramos en esta petición para que nuestro Padre nos mantenga fuertes en su Palabra, ya que nuestra fe está bajo constante amenaza.

Jesús nos enseña a orar así porque sabe que la tentación es algo que enfrentamos todos los días y que necesitamos depender de Dios, porque solos no podemos resistir todo lo que viene en nuestra contra. ¡Tentaciones hay por todos lados!

Y Jesús entiende esto mejor que nadie. Cuando estuvo en el desierto, Satanás lo tentó directamente. Pero Jesús no cayó. Él resistió, y lo hizo no solo para mostrarnos cómo hacerlo, sino para vencer en nuestro lugar. Y eso es lo más importante: Jesús ya ganó la batalla que nosotros no podemos ganar. No se trata de lo que podamos hacer, sino de lo que Él ya hizo por nosotros.

No estamos pidiendo que nunca se nos presente una tentación, porque eso es parte de la vida. Lo que pedimos es que Dios nos sostenga, que no nos deje caer cuando somos débiles. Y aunque a veces caigamos, Jesús nos levanta. Él nos da su Palabra y los sacramentos, que son alimento para nuestro espíritu, para que podamos seguir luchando con su poder, no con el nuestro.

Cuando oramos «no nos dejes caer en tentación», estamos confiando en que Dios, por medio de Jesús, ya hizo todo lo necesario para que podamos estar firmes, fuertes en su Palabra.

Padre nuestro, no nos dejes caer en tentación. Gracias porque, a través de Jesús, has hecho todo lo necesario para que podamos estar firmes ante la tentación. Ayúdanos a confiar en su victoria y a recordar que, aunque caigamos, siempre nos levanta con su perdón y gracia. En el nombre de Jesús. Amén.

Para reflexionar:
* ¿Qué personas o cosas podrían alejarte de Jesús?
* ¿Cómo pueden las personas alejarse de Cristo sin darse cuenta?

Diaconisa Noemí Guerra

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