"La única solución"

Alabado sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre misericordioso y Dios de toda consolación. 2 Corintios 1:3Alabado sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre misericordioso y Dios de toda consolación. 2 Corintios 1:3

Queridos hermanos en Cristo:

La historia de la salvación en Jesucristo llega a todo el mundo. Para que los lectores de estas Devociones Diarias puedan ver el poder del Salvador a nivel mundial, hemos pedido a nuestras Oficinas Internacionales que escriban las devociones de los viernes. Oramos para que el Espíritu toque su corazón a través de ellas.

En Cristo,

Pastor Ken Klaus,
Orador The Lutheran Hour
Cristo Para Todas Las Naciones

Con la finalidad de encontrar alivio y sobreponerse de su depresión, un hombre decidió buscar la ayuda de un psiquiatra. En la consulta, le explicó al médico los traumas de su juventud y las fallas de su vida adulta, todo lo cual le causaba angustia y tristeza.

Luego de analizar los problemas del hombre, el doctor le aconsejó que, para controlar la tristeza de su vida, mirara las cosas desde otra perspectiva, tratara de reír más a menudo y disfrutar de las cosas positivas que le rodeaban.

Después de pensar un rato, el doctor le recomendó que fuera a ver a un comediante que trabaja en un club nocturno: «Las personas que ven sus presentaciones han podido aliviar sus penas y encontrado alegría», le dijo con entusiasmo. «Quizá si va una de estas noches a ver su presentación, puede darle un refrescante cambio a su vida.»

El hombre suspiró profundamente ante estas palabras y dijo: «Si esa es la única solución para superar mis problemas, estoy perdido -porque ese hombre, ¡soy yo!»

Las soluciones que el mundo nos propone muchas veces no son nada más que una ayuda superficial para nuestros problemas. En cambio Jesús no vino tan sólo para levantarnos el ánimo; él vino para transformarnos completamente, de adentro hacia fuera. La entrega voluntaria de su vida en la cruz a cambio de nuestros pecados, nos liberó de las ataduras del demonio. A través de la fe somos libres y recibimos la vida eterna.

En tiempos de angustia y pena recuerden que, a través de Cristo, prevaleceremos. Jesús dijo: «En este mundo afrontarán aflicciones, pero ¡anímense! Yo he vencido al mundo.» (Juan 16:33b)

ORACIÓN: Amado Padre celestial, te damos gracias porque Jesús es la respuesta y solución a las penas de este mundo. Ayúdanos a acercarnos a ti en tiempo de necesidad, y a estar agradecidos por todo lo que tú nos das. En el nombre de Jesús. Amén.

Biografía del autor: Alexander Jesús Pérez León es el Director de la oficina de Cristo Para Todas Las Naciones en Venezuela. Dicha Oficina fue establecida en ese país en la ciudad de Caracas en el año 1953.

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