ALIMENTO DIARIO

  • "Un Amigo Fiel"


  • julio 10, 2010
  • Practiquen el dominio propio y manténganse alerta. Su enemigo el diablo ronda como león rugiente, buscando a quién devorar. Resístanlo, manteniéndose firmes en la fe. 1 Pedro 5: 8-9aPractiquen el dominio propio y manténganse alerta. Su enemigo el diablo ronda como león rugiente, buscando a quién devorar. Resístanlo, manteniéndose firmes en la fe. 1 Pedro 5: 8-9a


  • ¿Alguna vez se le ha hecho difícil saber quién es su amigo y quién no lo es?

    Eso le sucedió a algunos destacamentos ingleses en áreas remotas del África a comienzos de la Primera Guerra Mundial.

    Ellos había recibido el siguiente mensaje: «La guerra se ha declarado. Detengan a todos los extranjeros enemigos en su distrito». El Ministerio de Guerra recibió la siguiente respuesta de un destacamento bastante alejado: «Hemos arrestado a diez alemanes, seis belgas, cuatro franceses, dos italianos, tres austríacos y un norteamericano. Por favor, dígannos inmediatamente contra quién estamos en guerra».

    Como ven, a veces es difícil saber quiénes son nuestros amigos y quiénes nuestros enemigos.

    Y lo cierto es que algunos que hoy son nuestros amigos, mañana pueden convertirse en nuestros enemigos.

    Qué bueno es saber que Dios es un amigo constante e inalterable. Él no desaparecerá ni nos abandonará cuando las cosas se ponen difíciles. Al contrario, él ha mostrado a través del sacrificio dador de vida del Salvador, que siempre quiere estar más cerca de nosotros.

    Es posible que hoy usted se sienta entristecido porque un amigo le ha traicionado o decepcionado. Si ese es el caso, le invito a que conozca a mi amigo más fiel: el Dios Trino. Espero que logre conocerlo bien, porque él es un amigo que siempre, y quiero hacer énfasis, SIEMPRE, estará con usted. Él nunca le fallará.

    ORACIÓN: Padre celestial, tú eres nuestro gran Amigo. Eres el único que siempre está con nosotros, que siempre nos cuida, que siempre hace lo que es bueno y mejor para nosotros. Ayúdanos a alegrarnos en ti, y enséñanos a que siempre estemos agradecidos por la salvación que nos has dado a través de Jesucristo. En su nombre te lo pedimos. Amén.

    De una devoción escrita originalmente para «By the Way»