+1 800 972-5442 (en español)
+1 800 876-9880 (en inglés)
ALIMENTO DIARIO
No se inquieten por nada; más bien, en toda ocasión, con oración y ruego, presenten sus peticiones a Dios y denle gracias. Filipenses 4:6No se inquieten por nada; más bien, en toda ocasión, con oración y ruego, presenten sus peticiones a Dios y denle gracias. Filipenses 4:6
Mi padre solía decir una expresión que nunca se la escuché decir a nadie más. Una vez cada tanto sonreía y decía: «Estoy tan ocupado, que me siento como un perro con un solo ojo en una carnicería: no sé dónde mirar».
Esa expresión se le aplicaba muy bien a una señora ya mayor que conocí. A pesar de su edad se mantenía muy activa cocinando, limpiando, y haciendo todo cuanto se le cruzaba en el camino. Pero, por más ocupada que estuviera, lo primero que hacía cada mañana era orar. Me dijo que era una costumbre que había seguido desde que era niña.
Una mañana en que fui a visitarla la encontré leyendo el periódico. Bromeando le pregunté si ya había hecho sus oraciones. Muy seriamente me respondió: «Todavía no. Estoy leyendo el periódico para ver acerca de qué debo orar hoy».
Esa fiel hija de Dios no aceptó ser como un perro con un solo ojo, sino que intencionalmente concentró su atención en el lugar donde podía encontrar las cosas que necesitaban ser llevadas a Dios en oración.
Si nuestras prioridades son las que deben ser, si Jesús es más que un Salvador del domingo a la mañana, y si el Espíritu santo es nuestro constante compañero, nunca nos van a faltar motivos de oración. Como dijo Pablo: «… en toda ocasión, con oración y ruego, presenten sus peticiones a Dios…».
Y lo más importante y maravilloso de todo esto es que sabemos que nuestro Padre celestial, el Señor que envió a su Hijo a morir por nosotros para que fuéramos salvos, nos va a escuchar.
Esa es su promesa, por lo que le aliento a que le tome la palabra. Acerquémonos a Dios en oración no porque debemos hacerlo, sino simplemente porque hay muchísimas cosas por las cuales es necesario que oremos.
De una devoción escrita originalmente para «By the Way»
ORACIÓN: Querido Señor, a veces ya no sé para dónde mirar. Te pido que me guíes y me des sabiduría para que nada me distraiga de acercarme a ti en oración, sabiendo que tú estás siempre dispuesto a escucharme. En el nombre de mi salvador Jesucristo. Amén.