"Dios y nuestra relación con la comida"

Porque el reino de Dios no es comida ni bebida, sino justicia, paz y gozo en el Espíritu Santo (Romanos 14:17).

¿Cuál es tu relación con la comida? Es común conversar acerca de mejorar nuestras relaciones interpersonales, pero ¿te has detenido a pensar cómo la comida puede convertirse en una fuente de amor, confort y celebración, y también en una forma de castigo, restricción y ansiedad? ¡Me suena a una relación complicada! Y aún más allá, ¿alguna vez te has puesto a pensar en cómo tu relación con la comida impacta tu caminar espiritual?

En el podcast de Cristo Para Todas Las Naciones, Sentido Latino, reflexionamos hoy sobre este tema.

El reino de Dios no se trata de lo que comemos o bebemos, sino de justicia, paz y gozo en el Espíritu Santo. Dios nos está diciendo en la lectura de hoy que hay algo mucho más grande y mucho más satisfactorio que llenar nuestros estómagos. Esto es: llenar nuestros corazones con su amor y su presencia.

El mismo Jesús no solo vino a darnos panes y peces, sino a darnos vida en abundancia. Y lo hizo a través de su muerte y resurrección.

¿Cuál es tu relación con la comida? ¿Se ha convertido en una fuente de amor, confort y celebración, o en una forma de castigo, restricción y ansiedad? ¿Se te ha convertido en una relación complicada? ¿Está afectando tu caminar espiritual?

La buena noticia es que incluso cuando fallamos, cuando nos dejamos llevar por la comida o cualquier otra cosa que intentemos que nos satisfaga en lugar de Dios, ¡Jesús nos ayuda y perdona! Y él sigue capacitándonos para poner nuestra plena confianza en Dios para satisfacer cada área de nuestras vidas.

No se trata de qué comemos, sino de dónde encontramos nuestra verdadera satisfacción y plenitud, de recibir la justicia, la paz y el gozo que solo Dios puede brindarnos. La verdadera alegría y paz vienen de una relación íntima con nuestro Señor.

Padre nuestro, gracias por recordarnos que el reino de Dios va más allá de lo material, y que en Cristo encontramos la satisfacción de la verdadera justicia, paz y gozo en el Espíritu Santo. Fortalécenos para que, guiados por tu gracia, podamos cultivar una relación saludable con la comida y con nosotros mismos, buscando siempre reflejar tu amor y tu luz en todas nuestras acciones. Amén.

Para reflexionar:
* ¿Dónde pones la mayoría de tu atención y energía?
* ¿En dónde encuentras satisfacción, seguridad y plenitud?

Diaconisa Noemí Guerra

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