ALIMENTO DIARIO

  • "La naturaleza humana"


  • noviembre 22, 2008
  • Ahora bien, la fe es la garantía de lo que se espera, la certeza de lo que no se ve. Hebreos 11:1Ahora bien, la fe es la garantía de lo que se espera, la certeza de lo que no se ve. Hebreos 11:1


  • Los periódicos están llenos de historias de personas que hacen cosas no muy inteligentes.

    Habiendo aclarado eso, es para mi una alegría poder hablar acerca de alguien que ha hecho algo tan inteligente, que casi raya en la genialidad.

    No hace mucho fui a visitar a un amigo que vive en un apartamento alquilado. El dueño del apartamento estaba haciendo algunos arreglos, uno de los cuales era cierta renovación en los pasillos… pasillos que estaban recién pintados.

    Como es costumbre, cada cierta cantidad de pasos este hombre había puesto carteles que decían: «PINTURA FRESCA». Sabiendo que a la mayoría de nosotros nos gusta comprobar si lo que dice el cartel es cierto, en la esquina de cada cartel había puesto un poco de pintura y le había escrito: «PRUEBE AQUÍ».

    Comprobar por nosotros mismos si la pintura está seca es una de las tantas cosas que nos gusta hacer para verificar si algo que los demás nos dicen es cierto.

    Cuando alguien nos dice que la comida está demasiado salada, tenemos que probarla. Cuando alguien dice que cierto programa de televisión no vale la pena mirarlo, tenemos que mirarlo para ver si estamos de acuerdo. Y así sigue la lista.

    La mayoría de las veces hacer esto no tiene nada de malo, pero hay algunas cosas que deberíamos aceptar en fe. Cuando el Señor dice que debemos «huir del pecado», en vez de experimentar con algo que no complace a Dios, debemos huir del pecado.

    Cuando el Señor nos dice que debemos confiar en su Hijo y en la salvación que él ha logrado para nosotros en la cruz del Calvario, lo correcto es que le creamos.

    ¿Por qué?

    Porque a diferencia de tocar la pintura fresca que eventualmente lograremos lavarla, el no confiar en Dios trae consecuencias a largo plazo, incluso eternas.

    ¿Por qué confiar en Dios?

    Porque su Palabra es verdad, y porque Él nunca nos va a llevar por un mal camino.

    De una devoción escrita originalmente para «By the Way»

    ORACIÓN: Querido Señor, creo en ti; ayuda mi incredulidad. Cuando estoy tentado a dudar, a negar, o a alejarme de ti, mantenme firme en la fe que me has dado. En el nombre de Jesús. Amén.