"Pensamientos de Lutero"

Así que, hermanos, sigan firmes y manténganse fieles a las enseñanzas que, oralmente o por carta, les hemos transmitido. 2 Tesalonicenses 2:15Así que, hermanos, sigan firmes y manténganse fieles a las enseñanzas que, oralmente o por carta, les hemos transmitido. 2 Tesalonicenses 2:15

Como estamos tan cerca del Día de la Reforma, voy a dejar que Lutero se haga cargo de esta devoción. Cada luterano tiene un dicho o frase preferida de Lutero. A continuación leerán algunas de las mías. A pesar de tener casi 500 años, sus conmovedoras y poderosas palabras siguen siendo, por la gracia de Dios, pertinentes a nuestras vidas. Les invito a que las lean con detenimiento y las disfruten.

• Hay dos cosas que cada hombre debe hacer por sí mismo: creer y morir.
• Si somos correctos en todo aspecto de nuestra vida cristiana, pero en el momento en que las cosas se ponen difíciles rehusamos defender la verdad, somos traidores de Cristo.
• Algunos de nosotros… pensamos: «¡Si hubiera estado allí! Hubiera podido ayudar al niño. Hubiera lavado sus pañales. ¡Con cuánta alegría hubiera ido con los pastores a ver al Señor acostado en el pesebre!» Decimos esto porque sabemos lo grande que es Cristo. Pero si hubiéramos estado allí en ese momento, habríamos hecho lo mismo que hicieron las personas de Belén. ¿Por qué no lo hacemos ahora? Cristo está en nuestro prójimo.
• El cristiano debe amar a su prójimo, y dado que su esposa es su prójimo más cercano, ella debe ser su más profundo amor.
• Cuando predico no tengo en consideración ni a los doctores ni a los jueces, de los cuales hay más de cuarenta en la congregación. Tengo mi mirada puesta en las criadas y en los niños. Y si los eruditos no están conformes con lo que escuchan, la puerta está abierta.
• Cuando pienso en mis cruces, mis aflicciones, y mis tentaciones, me avergüenzo de mí mismo casi hasta la muerte, pensando en lo que son en comparación a los sufrimientos de mi bendito Salvador Jesucristo.
• Después de la fe, este es el mayor arte-estar conforme con el llamado que Dios nos ha dado. Yo todavía no lo he logrado.
• Ningún hombre debería estar solo cuando lucha contra Satanás. Con este propósito fueron instituidos la iglesia y el ministerio de la Palabra, para que las manos se unan y se ayuden mutuamente. Si la oración de uno no ayuda, la de otro lo hará.
• Escuchen la canción del ángel, ustedes que están afligidos: «Les traigo buenas noticias de gran alegría». Jesús no vino a condenarlo. Si usted quiere definir correctamente a Cristo, preste atención a cómo lo define el ángel: «una gran alegría».

Y para que no pensemos que el único sabio en la casa de Lutero fue el reformador…

«¡Me aferro a Cristo como un abrojo al sobretodo!» Las últimas palabras de Catarina Von Bora, esposa de Lutero.

ORACIÓN: Querido Padre celestial, gracias por levantar líderes en cada generación. Hoy te pido que me ayudes a mí a ser testigo fiel de tu Hijo, quien dio su vida para salvar mi vida. En el nombre de Jesús. Amén.